Sabía
que algo iba a pasar porque mi mascota estaba inquieta. Nunca la había
visto tan desesperada. Le conté a mi familia cuando supe sobre el finado colega y relacioné la noticia, pero no me creyeron.
Eran las 6:30 a. m. del pasado miércoles cuando recibí una llamada de un familiar sobre la muerte de un periodista en Medellín. En ese instante sabía que me habían chiviado. Lo segundo que pensé fue un suicidio porque cuando le quitan la vida a alguien el titular es diferente, publican luto en el periodismo; asesinaron, mataron, masacraron y así… Obviamente siempre argumentarán sobre la línea editorial.
Justo pensé lo mismo, la noche anterior, cuando en los noticieros nacionales hablaron de la muerte en extrañas circunstancias de un hijo de Navarro Wolf.
Ese día no tenía datos, no había pagado la cuenta del celular, el radio viejo se me dañó para escuchar a los colegas del AM, no tenía acceso a ningún medio, me sentía impotente y justo pasó lo mismo cuando dispararon contra Luis Carlos Cervantes. Quise pasar por un café internet pero ni dos mil pesos tenía para un cuarto de hora, para interpretar algo diferente a lo que ya sabía y en la tv repetían. Quería interactuar.
Por eso fue mi silencio, pero les confieso que tenía infinitas ganas de retuitear los mejores trinos.
Interacciones con Juan David
Recuerdo la primera vez que Juan David Arango me siguió. En sus contactos seguidos era el # 1415. En la mía cuando lo seguí no recuerdo cuál número ocupó. Cuando tengo nuevos seguidores siento un "deleite azucarado" pero cuando son colegas me genera grandes regodeos.
Creo
que cuando conversamos veía en su mirada que no le faltaba nada. Tenía
un sueldo, lo necesario para vivir bien, un buen apartamento, sin
extravagancias, familia con gustos por el periodismo, buenas palancas y
estudios en una de las mejores universidades del país.
Yo no lo hubiera dejado ir
Se destacó por ser uno de los periodistas caudalosos, no daba muchos datos pero era un fiel seguidor. Estaba pendiente de las publicaciones. Aclaraba, le gustaba retuitear, marcaba favoritos y compartía información.
Fue prudente con su retiro en Teleantioquia. Aunque alguna fuente me
decía lo contrario. Tal vez no quería hablar sobre su rechazo de
propuestas en mi excanal. Con orgullo decidió continuar con su empresa
de productos de nutrición y dieta que en alguna ocasión le manifesté una posible quiebra.
Con charlas opinaba sobre el mercado pirámide y que a pocos
beneficiaba. Su respuesta, después de tocar las gafas con su mano
derecha, organizar su correa, mirar sus zapatos y sonreír es
inolvidable.
Por otra parte, su loción nunca la pude identificar, le alegaba que el aroma en su cuerpo era D´orsay, pero que mejor no me decía porque cuando joven le gustaba una de pino.
En las veces que nos encontramos me preguntaba, ¿quién era Prensa Paisa? Cuando le respondía le hablaba sobre mis principales sospechosos. Era la única manera de pasar ese tedioso tema. Una forma de cambiarle el tema era decirle que contara un chiste.
Los chistes que siempre me contó:
* En una entrevista de trabajo el editor del periódico le pregunta a la periodista:
-Si yo digo fui un escritor, es tiempo pasado, pero si digo soy guapo, ¿qué es?
-Eso es exceso de imaginación, Señor.
*Un periodista entró a un bar y el administrador de San Carbón, restaurante Las Palmas, le pregunta:
-¿Vino de la Casa?
-No, del periódico.
*-Murieron 4 personas; 2 en un asesinato y otros dos en la reconstrucción de los hechos.
*-"Alud mata a 100 personas".
Una doña comenta en voz baja:
- Qué HP el Alud.
Como seguidor
Una aguja desinfectada sangra para quien la compre y la revenda pero lo más probable es que lleve a una quiebra
Hace 2 años John Peterson, uno de los vendedores estrella de la empresa mundial Herbalife, se disparó en su su camioneta con un arma de fuego. Según el New York Post el desnivel de su organización, las denuncias contra la empresa y no sostener su lujoso estilo de vida son algunas de las razones por las cuales pudo haberse suicidado.
Estas son más conocidas como Pirámides multinivel; supuestamente los participantes obtienen sus beneficios económicos cuando reclutan a nuevos participantes y obtienen dinero por vender un producto o servicio. En las citas hacen desayuno, almuerzo o cena.
En varias ocasiones me ofrecieron vender productos para la salud y mejorar la calidad de vida. Pero sin prestaciones e invertir con el propio negocio no lo veo rentable. Cuando los amigos me llamaban y me decían le tengo la solución, no trabaje más o si no tiene empleo usted será su propio jefe y otros discursos muy parecidos a los de los evangélicos, que todavía me causan risa, venga deme cinco minutos y hablan durante más de una hora.
En la gran mayoría de los casos, prometen ganancias, el objetivo de ser ‘exitoso’ sin depender de nadie y vender productos de nutrición. Hasta el momento en Colombia es legal, simplemente si usted compra y no vende usted se queda con el producto. Por lo general a usted le toca consumirlo o venderlo a mitad de precio.
La veo como una explotación de empleados independientes porque si usted tiene adscritos más de 100 vendedores usted gana. Usted conforma el sistema, pero no recibe prestaciones, en la compra y venta nada más le ofrecen un porcentaje. Es decir, su estructura inicia con la reclutación de niveles que sostendrán al creador, luego las de segunda escala se lucran del tercer escalón y así sucesivamente.
Cada una de las personas reclutadas deben dar un monto inicial de “inversión” para pertenecer a la red, la misma que n beneficia de la persona que la reclutó. Casi siempre la base se rompe cuando ya no hay clientes, empiezan con la familia, montan un local y la administración por lo general implica más gastos que ganancias.
Una vez asistí a la reunión y después de horas ceremoniales explicaron: ¡Vamos tú puedes! Si pagas un millón para iniciar y reclutas a 20 personas más, generarás dos millones de pesos a la organización. Ahora, supongamos que el 20% se quede contigo y el resto vaya a los reclutadores que están por encima tuyo, quiere decir que tus ganancias serán de tres millones. ¡Aprovecha esta oportunidad!
Triplica tu capital, habla con estos testimonios y otras dos horas.
Habrá personas que les funcionan pero a las que conozco no duran más de tres años con su idea. Además recuerdo que cambian totalmente su discurso y son positivos, hablan de la nueva vida y sus beneficios.
Cada persona es libre y hace vulgarmente "lo que se le de la gana con su plata".
Esta historia continuará...